La Policía de Carabineros de Chile investiga las supuestas transferencias de dinero realizadas por miembros de la institución de manera fraudulenta, llevando a la presidenta Michelle Bachelet a asegurar que «no (lo) va a tolerar».
Diez efectivos policiales, entre ellos un general y un coronel, fueron dados de baja luego que la investigación destapó un presunto fraude por la manipulación de montos de dinero de las cuentas corrientes de Carabineros que eran transferidos a cuentas privadas de agentes, en un hecho que podría convertirse en el mayor escándalo de corrupción de la Policía chilena.
«El Gobierno no va a tolerar ningún tipo de corrupción», afirmó este jueves la presidenta Bachelet, a medios locales al comentar este caso que salpica a una de las instituciones más respetadas del país.
Las transferencias se realizaron en 2015, y si bien no se han revelado los montos, la Policía estima que serían cifras millonarias, por lo que la Fiscalía también investiga el caso.
«Es una pérdida de patrimonio fiscal importante», afirmó, por su parte, Bruno Villalobos, director de Carabineros, quien denunció el caso el lunes pasado.
Bachelet destacó que fue la propia institución policial que informó sobre la investigación y el caso de fraude. «Aquí no ha habido el intento de colocar la basurita bajo la alfombra», aseveró.
«Aquí no se va a esconder nada, se va a comunicar todo lo que se tenga que comunicar y lo que haya realmente», sostuvo Villalobos.
Este escándalo de corrupción no tiene precedentes en Carabineros de Chile, una institución muy respetada y reputada como insobornable, pero que también ha sido cuestionada por su rudeza en manifestaciones estudiantiles.
AFP